¿Quieres mantener tu vivienda caliente y acogedora cuando bajen las temperaturas?
Cuando se trata de mantener tu casa y tu familia calientes, dispones de varias opciones, pero las dos más comunes son las calderas de gas natural y las calderas eléctricas. Aún así, existen ventajas y desventajas en los sistemas de calefacción eléctricos y de gas, por ello es importante considerar los beneficios de cada uno antes de tomar una decisión.
En Oscagas te mostramos algunos de los pros y los contras de los hornos de gas para calentar tu casa. Pero antes, vamos a conocer las diferencias entre estos dos tipos de sistemas. ¡Sigue leyendo!
Ventajas de la calefacción eléctrica
A continuación descubrirás cuáles son los principales beneficios que aporta la calefacción eléctrica frente a otros sistemas (carbón, aceite o gas):
Amigable con tu bolsillo
La calefacción eléctrica es económica, ya que los sistemas eléctricos son más baratos tanto en su coste inicial como en el de mantenimiento. Esto significa que no tendrás que gastar constantemente en reparaciones, y disfrutarás de un aparato con una larga vida útil.
Limpieza y mantenimiento sencillo
Como el polvo y las cenizas se eliminan completamente en el sistema de calefacción eléctrica, es un sistema depurado y los costes de limpieza se reducen al mínimo.
Ausencia de gases de combustión
Como en este sistema no se producen gases de combustión, no hay riesgo de que se calienten la atmósfera o los objetos. Por tanto, se trata de un funcionamiento higiénico y amigable con el planeta.
Facilidad de control
Se puede tener un control de la temperatura sencillo, preciso y fiable, ya sea con un mando o con interruptores automáticos.
Protección automática
La protección automática contra los sobrecorrientes o el sobrecalentamiento puede proporcionarse mediante interruptores adecuados en el sistema de calefacción eléctrica.
Método eficaz para controlar el confort
Muchos calefactores eléctricos tienen un termómetro interno muy sensible que detecta al instante una bajada de temperatura y trabaja para que vuelva a alcanzar la deseada. Tras este paso, el calefactor se apagará solo.
De este modo, puedes dejar tu casa estable las 24 horas del día sin preocuparte de que se genere una factura de gas muy elevada a final de mes.
Altamente escalable
Los sistemas de calefacción eléctricos vienen en muchos tamaños. Van desde los calentadores portátiles de cuarzo en forma de cubo más pequeños, hasta las unidades de techo radiante de 220 voltios.
Estos grandes equipos pueden calentar todo un sótano. También puedes comprar calefactores eléctricos para toda la casa.
Alta eficiencia de utilización
La eficiencia global de la calefacción eléctrica es comparativamente mayor. Se ha comprobado que se puede utilizar con éxito entre el 75% y el 100% del calor producido por la calefacción eléctrica.
En los casos de la calefacción por gas, combustible sólido y petróleo, las eficiencias son del 60%, 30% y 60% respectivamente.
Mejores condiciones de trabajo
El sistema de calefacción eléctrica no produce ruidos molestos, y además las pérdidas por radiación son bajas. Por tanto, trabajar con calefacción eléctrica es cómodo y fresco.
Seguridad
La calefacción eléctrica es bastante segura. La única forma de que suponga un riesgo para la seguridad es que no esté bien instalado y haya cables expuestos dentro de tus paredes. Suponiendo que no tengas nada de qué preocuparte, la calefacción eléctrica es, con mucho, más segura que un horno, una chimenea o una caldera.
Desventajas de la calefacción eléctrica
A la inversa de todas las ventajas, los sistemas de calefacción eléctricos también tienen algunos inconvenientes.
Cables más cortos
Los cables de los calefactores eléctricos son demasiado cortos. Tienes que enchufarlos y alimentarlos, y por eso los cables largos son imprescindibles. Este tipo de equipos están pensados para pasar desapercibidos.
Limitados a espacios pequeños
Los calefactores eléctricos sólo pueden aclimatar un pequeño espacio de tu casa. Se adaptan perfectamente a los interiores, pero no pueden abarcar el exterior o aquellos lugares más grandes.
Son adecuados como calefacción complementaria. Puedes colocarlos en habitaciones que necesiten estar un poco más calientes que el resto de la casa, como en el baño. Si utilizas la calefacción eléctrica en todas partes, notarás cómo la factura de la luz se dispara.
Sin conductos
La ausencia de conductos significa que una habitación tardará más tiempo en aclimatarse y el aire caliente permanecerá alrededor de esta.
Ventajas de la calefacción de gas natural
Hay unas cuantas razones que explican la inclinación que tienen muchas personas por los sistemas de calefacción con gas natural. Te explicamos algunas.
Costes energéticos más bajos
Los costes de la energía varían según el lugar y el proveedor de servicios, pero en general, el gas natural es menos caro que la electricidad. Cuanto más utilices tu calefacción en invierno, mayor puede ser esta diferencia de costes. También es importante comparar las calificaciones de eficiencia energética de los equipos.
Los aparatos nuevos de gas natural tienen una eficiencia de hasta el 98%, mientras que las unidades más antiguas pueden tener un 80% o menos. Así que actualizar tu sistema de calefacción ahora puede ahorrarte mucho dinero en costes de energía este invierno y en los próximos años.
Más eficaz en ambientes fríos
La calefacción de gas es capaz de calentar a mayor temperatura que las de tipo eléctrico. Además, funcionan en todo tipo de condiciones exteriores, mientras que una bomba de calor deja de funcionar con la misma eficacia cuando la temperatura exterior baja a menos 0 grados centígrados.
Más sano y respetuoso con el medio ambiente
El gas natural se quema de forma más limpia que otras fuentes de energía, como el petróleo y la madera, en una chimenea. Eso lo hace mejor para la salud de tu hogar. Para el medio ambiente, este produce menos dióxido de carbono que la electricidad generada por el carbón o el petróleo.
Servicio más fiable
Las líneas de gas natural están enterradas, mientras que muchas líneas eléctricas están en la superficie y pueden verse afectadas por tormentas o accidentes. Si se va la luz, necesitarás un generador para hacer funcionar el horno, pero el suministro de gas debería funcionar con normalidad.
Desventajas de la calefacción de gas natural
En Oscagas queremos que tomes una decisión bien informada al momento de elegir el tipo de calefacción ideal para ti. Es por eso que a continuación te presentamos las desventajas de este tipo de sistemas.
Es peligroso en caso de uso irresponsable
El gas natural debe manejarse con mucho cuidado porque es un material combustible que puede explotar.
Es importante invertir en un servicio de instalación e inspección experto para reducir riesgos. También puede ser de mucha ayuda un medidor de fugas de gas si queremos estar seguros de que el gas natural funciona correctamente.
Fuente de energía no renovable
Procede de plantas y animales descompuestos, enterrados a gran profundidad bajo la superficie de la Tierra, durante millones de años. Por eso lo llamamos no renovable. Si se acaba, no podemos producir más.
Como ves, existen muchas diferencias entre la calefacción eléctrica y la de gas natural. Es por ello que, a modo de resumen, te dejamos una tabla comparativa recordándote los aspectos más importantes para que tomes la mejor decisión.